Descripción
Para nosotros, la hora de comer no sólo contempla cubrir la necesidad básica de alimentarnos, sino que es, también, un rato de relación y aprendizaje de autonomía personal donde se muestran las diferentes particularidades que nos caracterizan y dan a conocer a la persona en concreto, dentro de un marco de convivencia y educación. Las risas, las conversaciones sobre lo que nos ha pasado, los instantes de euforia cuando los cubiertos se convierten en instrumentos musicales, momentos donde se facilita la autonomía del niño recogiendo el plato… todas estas situaciones y muchas más forman parte de ese ratito tan íntimo y cotidiano como es el comedor de la escuela. Contamos con unos grandes colaboradores, pues los niños y niñas se ofrecen con gusto a montar el comedor, y es que entre todos es más divertido, nos hace sentir bien ayudar a los otros. Vivimos pequeños momentos con grandes personitas que nos hacen recordar qué fácil y maravilloso es ayudar a los amigos.