El jardín de la escuela infantil, un espacio pedagógico
Demos la importancia que merece al jardín de la escuela infantil: un espacio educativo exterior lleno de posibilidades para explorar y experimentar de forma libre.
El otoño se acerca al jardín de la escuela, un espacio muy especial para los niños y niñas, casi mágico. Es allí donde se puede sentir el aire libre y el sol en la piel, y reencontrarse con la naturaleza y todo lo que nos ofrece: plantas, hojas, arena, piñas… ¡y hasta algún caminito escondido!
Pero al igual que en las salas interiores, el espacio exterior debe ser un lugar diseñado por el adulto, un espacio donde poder cubrir todas las necesidades vitales del niño en todos sus aspectos, un lugar donde poder trepar, subir y bajar, mantener el equilibrio… sintiéndose plenamente libre.
El jardín es un espacio donde poder tomar decisiones y adquirir nuevos aprendizajes. Y donde los retos estén presentes en todo momento, para que los peques puedan descubrir y descubrirse a su propio ritmo.
Todo esto y mucho más. Porque el jardín de la escuela infantil es un lugar donde el adulto debe estar presente para poder acompañar todas las emociones que surgen mientras los niños disfrutan de su tiempo, mientras descubren la sensación que les produce la arena en su piel.
Un lugar donde llenar y vaciar, agrupar y transportar, se convierte en un placer, donde descubrimos que con los diferentes materiales y con nuestro propio cuerpo, podemos ser artistas, y donde el placer de compartir y convivir nos abre las puertas a relaciones y vínculos.
Artículo escrito por el equipo de la Escuela Infantil Municipal Nero Nas, de Badalona.