Los espacios y los materiales en la escuela infantil
Los espacios y los materiales de las escuelas infantiles deben estimular la curiosidad y favorecer el autoaprendizaje.
El eje principal en una escuela infantil es el de las actividades de la vida cotidiana, que lo conforman los momentos de higiene personal, los de descanso y los momentos de juego. Los espacios de la escuela infantil son el lugar donde la vida cotidiana y el juego hacen posible infinidad de situaciones de aprendizaje, tanto individuales como colectivos.
Entendemos todos ellos como espacios educativos y, por tanto, ofreceremos materiales y propuestas diversas también en todos ellos. El jardín de infancia debe convertirse en un espacio seguro para los niños y niñas y, al mismo tiempo transmitir tranquilidad e interés, creando un espacio de bienestar y acogida.
Utilizaremos materiales inespecíficos como madera, tubos, tapas, cadenas o troncos, así como propuestas de barro o pintura, para que los niños puedan satisfacer sus necesidades de manipulación y de expresión.
Propuestas, también, para favorecer el lenguaje matemático y el corporal.
En los diferentes espacios deberemos tener propuestas y materiales suficientes y diversos, estimulantes y en buen estado, bien distribuidos en el espacio y que faciliten y favorezcan el aprendizaje de los niños y niñas, invitándoles a la manipulación, a la investigación o a la creación. strong>
A partir de la observación, podremos saber cuáles son sus intereses y curiosidades. Así, podremos ir adaptando y montando los espacios según sus inquietudes y necesidades, en función de su edad y momento motriz, para favorecer sus aprendizajes.
Entendemos las aulas y otros espacios de las escuelas infantiles como espacios educativos.