Descubrimos el otoño en el jardín de la escuela
Exploramos el jardín de la escuela infantil, que ha cambiado los colores en otoño. Recogemos hojas secas y conocemos el entorno.
La experimentación y el descubrimiento de los elementos naturales permite al niño conocer lo que le rodea. Salir de la escuela, para descubrir o reencontrarse, para explorar los espacios de nuestro entorno, nuestro pueblo e incluso los fenómenos meteorológicos es un eje importante de nuestra actividad, haciendo así que sea una escuela abierta al entorno que nos rodea.
Podemos encontrar la naturaleza alrededor de la escuela, rincones cercanos que pisamos cada día, la escuela de los niños mayores, las tiendas donde vamos a comprar con el padre, la madre y los abuelos…
Descubrimos las ferias y las fiestas mayores.
Observemos el parque, el bosque lleno de árboles, la fuente, el pequeño arroyo…
Somos conscientes de que llueve, que llueve y hace sol y que sale el arco iris; que el sol se esconde tras las nubes y se hace oscuro; que sopla el viento muy fuerte y hace volar las hojas; incluso que nieva…
Estos pequeños grandes descubrimientos nos ayudan a crear lazos con nuestro entorno, a relacionarnos y a crecer.
OTOÑO EN EL JARDÍN DE LA ESCUELA
El otoño es una estación que nos proporciona muchos elementos nuevos, ideales para descubrir y experimentar. Además, el jardín de la escuela es un espacio muy propicio para este hecho, ya que por sí mismo es naturaleza.
Los niños y niñas sienten curiosidad por descubrir los elementos naturales que en él encontramos: hojas, ramas, piedras, flores… Y buscan diferentes posibilidades para descubrirlos: los tocan, los huelen, los pisan o imitan las acciones de los otros niños.
Núria Ruiz
Directora de la EBM La petita Estelada (Cànoves i Samalús)
Novembre 2017